Un incendio forestal registrado el último lunes 1 de septiembre en el sector Chiwila, afectó gravemente a las comunidades de Central Huayta y Huaytapata, en la provincia de Lampa. El siniestro dejó 42 familias afectadas, 3 damnificadas y provocó la pérdida de 50 hectáreas de pastizales, un recurso vital para la actividad ganadera que constituye el sustento principal de la población.

Según las primeras indagaciones, el fuego se habría originado por la acción imprudente de un poblador, quien tras provocar el incendio negó su responsabilidad y abandonó el lugar sin pedir ayuda ni intentar sofocar las llamas.

Los pobladores, temerosos de que el fuego avance hacia sus viviendas, trabajaron intensamente durante varias horas y lograron controlar el siniestro recién en la madrugada del martes 2 de septiembre.

Sin embargo, la emergencia evidenció una preocupante falta de coordinación institucional. Solo se contó con la participación de serenazgo municipal, Defensa Civil y la Policía Nacional, mientras que los demás integrantes de la Plataforma Provincial de Defensa Civil estuvieron ausentes, pese a la magnitud del evento.

Este hecho ha generado malestar en la población, que reclama mayor compromiso de las autoridades en la prevención y atención de desastres naturales, así como sanciones para quienes con sus actos pongan en riesgo la vida y los recursos comunales.